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lunes, 29 de octubre de 2012

CREACIÓN

EL SUEÑO DEL SALTAMONTES

Había una vez un saltamontes que no sabía saltar. Su sueño era ganar los Juegos Olimpicos en salto de longitud , pero sus amigos se reían de él y decían que nunca lo lograría.

Un día decidió hacer un viaje. En el viaje encontró animales que no conocía; después de un largo día llegó a la charca de las ranas. Las vio saltar y les preguntó:

- ¿Podríais enseñarme a saltar?.

Las ranas le conteraron que sí , mientras le enseñaban a saltar detrás de unos matorrales.
Un chico que estaba buscando objetos en el bosque les estaba mirando y se dijo a´sí mismo :

- En el colegio nos habían dicho que los animales no hablaban.

Tras un largo día de entrenamiento el saltamontes se durmió. A la mañana siguiente muy temprano empezaron a entrenar, lo intentaron de todas las formas pero no podía saltar, definitivamente las ranas le dijeron:

- No podemos ayudarte a saltar no eres como los demás.

El saltamontes estuvo llorando toda la noche, de repente, apareció el hada de los deseos que dijo:
- Te concederé un deseo a cambio de que seas profesor de salto de los animales que tienen tus mismas dificultades. El saltamontes deseó poder saltar muy alto. Probó saltar y llegó muy alto.
En el viaje de vuelta se lo pasó muy bien saltando de árbol en árbol. Cuando llegó a su casa participó en los juegos olímpicos, ganó la medalla de oro y enseñó a muchos animales a saltar .

JUAN MANUEL GALLEGO

domingo, 28 de octubre de 2012

HALLOWEEN

Halloween o Halloe´en o Noche de Brujas es una fiesta proveniente de la cultura celta que se celebra principalmente en Estados Unidos en la noche del 31 de octubre. Los niños se disfrazaban para la ocasión y pasean por las calles pidiendo dulces de puerta en puerta. Después de llamar a la puerta los niños pronuncian la frase "truco o trato", "dulce o truco" o "dulce o travesura"(proveniente de la expresión inglesa trick or treat), Si los adultos les dan caramelos, dinero o cualquier otro tipo de recompensa, se interpreta que han aceptado el trato. Si por el contrario se niegan, los chicos les gastarán una pequeña broma, siendo la más común arrojar huevos o espuma de afeitar contra la puerta.
Se dice que la noche de Halloween, la puerta que separaba el mundo de los vivos del Más Allá se abría y los espíritus de los difuntos hacían una procesión en los pueblos en los que vivían. En esa noche los espíritus visitaban las casas de sus familiares, y para que los espíritus no les perturbasen los aldeanos debían poner una vela en la ventana de la casa por cada difunto que hubiese en la familia. Si había una vela en recuerdo de cada difunto los espíritus no molestaban a sus familiares, si no era así los espíritus les perturbaban por la noche y les hacían caer en terribles pesadillas.